lunes, 30 de noviembre de 2009

LLUVIA...


Paseaban tranquilamente disfrutando de una fresca tarde de otoño... Ni siquiera se habían dado cuenta de que el cielo se tornaba gris...que los nubarrones negros se iban haciendo cada vez mayores... amenazantes... oscureciéndolo rápidamente.
Pequeñas e insistentes esferas de agua comenzaron a caer... Corrieron con la intención de refugiarse pero en segundos estaba completamente empapados... el pelo chorreaba, la ropa adherida al cuerpo...
Marina sentía que sus pezones se endurecían por el frío, por el viento, por la tela pegada a su piel... Y Alberto también reparó en ello...
Sus ojos cambiaron... su mirada era la manifestación del deseo...La apoyó contra la pared y comenzó a besarla en la boca... con urgencia, sin pausa, obligándola a abrir los labios y que le diera su lengua mientras deslizaba una mano por debajo del vestido, acariciando sus nalgas y la otra por encima del tanga, introduciendo los dedos por él hasta alcanzar el ya ardiente sexo de Marina... El roce suave y lento de su pulgar por el clítoris la enloquecía, la transportaba a un placer infinito que la hacía separar más sus piernas... invitándole a que siguiera con sus caricias...un dedo, dos... dentro, fuera y otra vez de arriba a abajo... cada vez más deprisa...
El sonido de la lluvia, jadeos, gemidos...La excitación se concentra en sus entrañas hasta que detuvo su respiración en medio de un delicioso orgasmo...
Marina quería más... ahora era Alberto el que estaba en la pared... ella dirigió su boca directamente hasta su sexo erguido, erecto, febril...quería que recibiera las mismas caricias que le había regalado, que sintiera el mismo placer...
Su lengua recorría el pene en toda su extensión, despacio, muy despacio...dibujaba círculos alrededor... sus labios lo engullían, chupaban, lamían...a la vez que sus manos acariciaban los testículos...Y Alberto se retorcía entre espasmos que no podía ni deseaba controlar...
Marina alzó una pierna y él agarrando su muslo hizo que rodeara su cintura...
Ahora, dos cuerpos en uno, a un mismo ritmo desenfrenado...
Y así, como esas nubes...mojados por dentro y por fuera...se volvieron a derramar gotas de lluvia de la pasión...
Pasionhada.

jueves, 19 de noviembre de 2009

FANTASÍA...REALIDAD...

Su nuevo compañero le resultaba muy atractivo...ojos oscuros y nariz casi perfecta, una boca que invitaba a besar...alto, muy alto comparado con ella, moreno, de espaldas anchas y largas piernas...
Cuando él no se daba cuenta recorría con su mirada aquella figura y más de una vez se sorprendió de su propia imaginación...
Sentada sobre aquella enorme mesa y él a sus pies quitándole los zapatos, incorporándose para ir desabrochando uno a uno los botones de su camisa mientras sus labios pasaban sin prisa desde el lóbulo de la oreja a su cuello...Introduciendo sus dedos por el sujetador, acariciando sus pezones...De pie, entre sus piernas, sintiendo en su vientre cómo aquel sexo se endurecía y el suyo se iba humedeciendo por el deseo y el placer...
Dirigió las manos hacia el pantalón...el sonido de la cremallera se mezcló con los jadeos y gemidos que flotaban en el ambiente como única melodía...liberando de tanta opresión a ese miembro que luchaba por salir de tal opresión...deleitando su vista y sus sentidos...haciendo que su lengua se deslizara por sus labios...deseando disfrutar de su sabor...
Aquellos brazos fuertes la levantaron por las nalgas sin apenas esfuerzo... atrapando sus muslos...abriendo sus piernas para sentir cómo se adentraba en sus entrañas...
Ahora gozaba, disfrutaba de la fantástica realidad...
Pasionhada.

domingo, 15 de noviembre de 2009

SOBRE LA ARENA...


El verano había terminado pero aún podía disfrutar del sol que extrañamente lucía ese otoño...
Le apasionaba el mar, era uno de sus lugares favoritos para evadirse de los problemas, de la rutina...Iba siempre a la que llamaba "su playa"...tranquila, solitaria, lejos del bullicio de otros bañistas.
Le gustaba recostarse desnuda sobre la arena, cerrar los ojos, escuchar el murmullo de las olas, sentir las caricias del sol y de la suave brisa en su piel...y dejaba abiertas sus piernas para recibirlas...dejando volar su imaginación y despertando su deseo más sensual.
Percibió una extraña sensación...inquieta abrió los ojos y allí estaba él...frente a ella, mirándola descaradamente, sonriendo tan tranquilo.
Sin mediar palabra se arrodilló entre sus piernas y comenzó a besarla larga y profundamente mientras deslizaba sus dedos desde la espalda a sus nalgas y con la otra mano jugueteaba con uno de sus pechos...Bajó su boca hasta sus pezones para lamerlos...mordisquearlos con suavidad.
Movió sus manos acercándolas hasta el miembro que tenía delante de ella, creciendo, palpitando...acariciándolo por entero hasta que lo escuchó gemir...Su temperatura aumentaba, su sexo no dejaba de latir, de humedecerse...Él se había levantado un poco dejando su sexo a la altura de su boca y ella comenzó lenta y suavemente a disfrutar de su sabor...rozándolo con sus labios, su lengua...adentrándolo... Sabía que ya estaba fuera de control pero no quería que su boca apagara ese fuego encendido por ahora.
Tumbada de nuevo sobre la arena, su cuerpo sintió la invasión de otro...con movimientos profundos, fuertes...ritmo, pasión, deseo...Olor a mar...
Y como esas olas se sintieron morir al alcanzar la orilla del placer...
-¿Tu nombre?
-María...¿El tuyo?
-Javi.
Pasionhada.

sábado, 14 de noviembre de 2009

NADA...

Calentaste mi cuerpo y mi alma
entre tus manos, en tus sábanas...
De tu boca ni una palabra,
el TODO se ha vuelto NADA...
Pasionhada.


TU LENGUA...

Le gustaba saborear cada milímetro de su piel...Y sentía cómo el fuego ardía dentro de ella...
Lamía cada uno de los dedos de sus pies, chupándolos despacio, tomándose su tiempo para ir ascendiendo por sus piernas...Deslizaba su lengua...sentía su aliento en cada rastro húmedo que iba dejando...y ansiaba que siguiera su camino...más arriba...más...las rodillas...los muslos...las ingles...
Y él gozaba con su desespero...se entretenía dibujando pequeños círculos...avanzando, retrocediendo...
Se retorcía de placer en medio de aquella tortura...se escuchaba jadear, gemir, rogar...
Abrió completamente sus piernas, ofreciéndole un lugar más exquisito a esa lengua insaciable...
pensaba que no iba resistirse ante tal tentación pero estaba equivocada, al menos, por ahora...
La rozó con su nariz...absorbiendo su olor...otro ligero toque con los labios y subió hasta sus pechos...mordisqueando los pezones que estaban completamente endurecidos...
La locura invadía su mente, el deseo sus entrañas y la humedad su sexo...
Nunca supo si sus súplicas fueron en voz alta...pero parecía que él se hubiera apiadado ante tal agonía...
Descendió nuevamente hasta su sexo para beber del manantial que emanaba de él...
Chupando, chasqueando, lamiendo, acariciándolo, adentrándose...
Arqueó su espalda para recibir un escalofrío que sacudió todo su cuerpo...Ahora reinaba la calma.

Pasionhada.




viernes, 13 de noviembre de 2009

¿QUÉ DESEAS?...

- ¿Qué deseas?...
-A tí...
Comenzó a besarla en la boca... a acariciar sus pechos sobre la ropa...sus pezones se habían puesto duros...erguidos...
Su corazón latía a mil...sentía cómo se iba humedeciendo, cómo el deseo se apoderaba de ellos...
La apoyó contra la puerta...acarició sus senos por dentro del sujetador mientras su lengua le rozaba los labios...Ella abrió la boca...y ambas lenguas se enredaron...
Desabrochó los botones de su blusa...lentamente la falda cayó al suelo...y suavemente la despojó del tanga...
Unos dedos bajaban ahora por su cintura...recorriendo sus nalgas...acariciando su tibio y mojado sexo...adentrándose por él...haciéndola gemir...Y esa boca ahora continuaba devorándola... mordisqueaba, lamía...descendía por su cuello, por su vientre...llegando a su sexo...absorbiendo las esencias que emanaban de entre sus muslos, ...Sumida en una agonía, delirio y placer...convirtió en rocío su orgasmo...y él lo recibió en su paladar...
Pero ella quería más...
Deseaba sentir en sus entrañas aquel miembro erecto, duro, caliente...tan mojado como ella...Y se dejó llevar...Abrió sus piernas y se sentó sobre él...sus nalgas apretadas contra sus caderas mientras él se adentraba...penetrando su alma. su cuerpo, su ser...
Juntos comenzaron a moverse en una tribal danza...como el suave vaivén de las olas, como el fuerte viento del huracán...
Nuevamente los músculos se contrajeron...la respiración se detuvo...un único gemido fue testigo del volcán en erupción...
Nunca su sexo había estado tan lleno...tan satisfecho...por él...

Pasionhada.

martes, 10 de noviembre de 2009

PASIÓN...


Le observaba mientras trabajaba frente al ordenador...Le notaba tenso y deseaba aliviar aquellos músculos con caricias...
Se acercó sigilosamente y dejó caer las manos en sus hombros... comenzó con suavidad a masajearlos y notaba cómo él inclinaba la cabeza... relajándose... todo lo contrario de lo que le ocurría a ella...
Con ternura enredaba los dedos en el cabello sedoso... las mejillas... la barba...
Se reclinó para llegar a su oreja y no pudo evitar que su lengua se adentrara en ella...sabía que le gustaba... y a ella también... Podía aspirar su aroma así como notar que la respiración se agitaba compartiendo un gemido...
Como si sus manos cobraran vida propia, comenzaron a deslizarse por el pecho, desabrochando hábilmente cada uno de los botones de la camisa, mientras, sus pechos al roce con la espalda, alimentados por el deseo se endurecían y erguían...
La tensión se había acumulado en sus pantalones y comenzaba a desesperarse por librar una batalla que sólo ella podría poner fin...
Sintió como unos suaves dedos se adentraban... se apoderaban de su miembro erecto y lo llevaba al delirio...
No podía permanecer inmóvil mucho más tiempo... ahora deseaba regalar caricias mientras las recibía...Se giró quedando frente a frente...
En los ojos sólo había el brillo de la pasión y las palabras se ahogaron con largos besos, húmedos, tiernos, salvajes... mezclando salivas, enredando lenguas...Besos interrumpidos cuando él bajó sus labios por el cuello de ella, llegando a sus pezones, rozándolos, mordisqueándolos, disfrutándolos...
Y en imparable descenso...su vientre, su ombligo, su sexo... saboreando la humedad que emanaba entre sus piernas y que la llevaban al más dulce de los placeres...
Ávidos por acabar con esa tortura...la sentó sobre sus muslos para adentrarse en ella, para ser tan sólo dos cuerpos en uno, para iniciar movimientos rítmicos que los harían estallar al unísono alcanzando el éxtasis en un intenso orgasmo...
Pasionhada.

jueves, 5 de noviembre de 2009

TU ESPALDA...


Sobre tu espalda deslizaba
mis manos cálidas y blancas
quería dejar una parte
de mi existencia clavada,
mis huellas para siempre
en ella marcadas.
En silencio iba gritando
cuánto te amaba,
que eras todo para mí,
que sin tí no sería nada.
Te diste la vuelta
y en tu cuello las enredaba,
para acercar mi boca
a tu boca deseada,
para que mi pecho con el tuyo
fueran uno solo,
en conjunción acomodada.
Y ya no había espacio
en tu almohada, en tu cama,
entre tibias sábanas,
me quedé en tí incrustada,
mis curvas se replegaban,
mi cuerpo sobre tí danzaba,
y en este baile contigo
la luna alcanzaba.

Para siempre colgada ...
de tu espalda.

© Pasionhada.